Viviendo el Reino: Una Exploración Interactiva

Viviendo el Reino de Dios

Una exploración interactiva de la generosidad, la justicia y la unidad en tiempos caóticos.

Principios Fundamentales del Reino

El informe se centra en tres virtudes esenciales que emanan del Reino de Dios. Selecciona un principio para profundizar en su significado bíblico y descubrir cómo se aplica a los desafíos de nuestro mundo.

Bienvenido a la Exploración del Reino

El concepto del "Reino de Dios" es una doctrina revolucionaria que ofrece un plan divino para la sociedad. No es simplemente una realidad futura, sino una que irrumpió en la historia con Cristo y que estamos llamados a vivir hoy.

Esta aplicación te permite deconstruir este concepto. Comienza seleccionando uno de los tres principios fundamentales de arriba para ver cómo podemos aplicarlos en un mundo que necesita desesperadamente la esperanza y la transformación del Reino.

La Tensión del "Ya, pero Todavía No"

Una idea clave para entender el Reino es su doble naturaleza. El Reino **"ya"** está aquí, activo en el mundo a través de la Iglesia y los creyentes. Sin embargo, **"todavía no"** ha llegado a su plenitud final. Vivimos en esta tensión, trabajando por la justicia y la paz en un mundo imperfecto, con la esperanza segura de su consumación futura. Esta perspectiva nos da tanto la urgencia para actuar ahora como la paciencia para perseverar.


Estudio de Caso: Acción Social en Guayaquil

El informe destaca ejemplos concretos de cómo se viven los principios del Reino. Este gráfico visualiza los tipos de proyectos de ayuda social realizados por diversas organizaciones cristianas en Guayaquil, Ecuador, mostrando un enfoque práctico en las necesidades de la comunidad.

Fundamento Bíblico

Explora los pasajes bíblicos clave que sustentan cada principio. Usa los filtros para centrarte en las Escrituras relacionadas con la generosidad, la justicia o la unidad.


Viviendo el Reino Ahora: Un Llamado a la Acción

Vivir en el Reino no es una aspiración pasiva, sino un llamado activo. Comienza con una transformación personal a través de la entrega a Cristo, pero se manifiesta colectivamente a través de la Iglesia. Somos llamados a ser agentes de la generosidad, la justicia y la unidad de Dios en un mundo que las necesita desesperadamente.

Esta tarea requiere una dependencia constante de la gracia de Dios y el poder del Espíritu Santo. Que esta exploración te inspire a encarnar los valores del Reino en tu propia vida y comunidad, convirtiéndote en un faro de esperanza en medio del caos.

Aplicación interactiva basada en el informe "Vivir ya en el 'Reino de Dios'".

jueves, 29 de diciembre de 2011

El profeta es un hombre inspirado

En el sentido más estricto de la palabra.  Nadie en Israel tuvo una conciencia tan clara de que era Dios quien le hablaba y de ser portavoz del Señor como el profeta.  Y esta inspiración le viene de un contacto personal con él, que comienza en el momento de la vocación.  Por eso, cuando habla o escribe, el profeta no acude a archivos y documentos, como los historiadores; tampoco se basa generalmente en la experiencia humana general, como los sabios de Israel.  Su único punto de apoyo, su fuerza y su debilidad, es la palabra que el Señor le comunica personalmente, cuando quiere, sin que él pueda negarse a proclamarla.  Palabra que a veces se asemeja al rugido del león, como indica Amós (1, 2), y en ocasiones es «gozo y alegría íntima» (Jr 15, 16).  Palabra con frecuencia imprevista e inmediata, pero que en momentos cruciales se retrasa (Jr 42, 1-7).  Palabra dura y exigente en muchos casos, pero que se convierte en «un fuego ardiente e incontenible encerrado en los huesos», que es preciso seguir proclamando (Jr 20,9).  Palabra de la que muchos desearían huir, como Jonás, pero que termina imponiéndose y triunfando.  Este primer rasgo resulta desconcertante a muchas personas.